El Bautismo de Niños
{ Donado por Ernesto Redondo }
El bautismo de niños es una de las doctrinas más críticas de la Iglesia Católica: "Puesto que nacen con una naturaleza humana caída y manchada por el pecado original, los niños necesitan también el nuevo nacimiento en el Bautismo para ser librados del poder de las tinieblas y ser trasladados al dominio de la libertad de los hijos de Dios, a la que todos los hombres están llamados. La pura gratuidad de la gracia de la salvación se manifiesta particularmente en el bautismo de niños. Por tanto, la Iglesia y los padres privarían al niño de la gracia inestimable de ser hijo de Dios si no le administraran el Bautismo poco después de su nacimiento" (p. 358, #1250).
El Catecismo nos indica dónde se originó esta doctrina fundamental: "La práctica de bautizar a los niños pequeños es una tradición inmemorial de la Iglesia. Está atestiguada explícitamente desde el siglo II" (p. 359, #1252 ) Aquí el Catecismo admite que esta doctrina no está basada en las Escritura
Es una tradición hecha por hombres
Al respecto, la advertencia de Pablo es muy oportuna: "Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo". Colosenses 2:8
El Bautismo en la Biblia
Esta práctica perturba en especial porque la Biblia no registra ni un solo caso en que un niño haya sido bautizado. Por el contrario, en cada ocasión en que se menciona el bautismo, quienes participan son personas con edad suficiente para escuchar y recibir el evangelio. "Y Jesús, después que fue bautizado, subió luego del agua". Mateo 3:16 Por si no se acuerdan, ni María o José lo llevaron al río en sus brazos.
En la Biblia vemos que el bautismo siguió a la aceptación de la salvación dada por Cristo. El etíope eunuco, quien fue guiado por Felipe para creer en Cristo y ser salvo, era adulto cuando fue bautizado: "Y descendieron ambos al agua, Felipe y el eunuco, y le bautizó". Hechos 8:38
Otros fueron bautizados después que creyeron: "Y Crispo, el principal de la sinagoga, creyó en el Señor con toda su casa; y muchos de los corintios, oyendo, creían y eran bautizados". Hechos 18:8
Cuando la gente aceptaba el llamado de Juan el Bautista al arrepentimiento, ellos "eran bautizados por él en el Jordán, confesando sus pecados". Mateo 3:6
Es obvio que los recién nacidos no podían arrepentirse, creer, ni confesar sus pecado Por tanto, nunca podrían estar capacitados para ser bautizados como enseña la Biblia.
El carcelero de Filipos
Cuando el carcelero que custodiaba al apóstol Pablo en Filipos le preguntó: "¿Qué debo hacer para ser salvo?" (Hechos 16:30), Pablo respondió: "Cree en el Señor Jesucristo" (v. 31). Después que el carcelero creyó, Pablo lo bautizó (v. 33).
Cuando Pedro predicó en Hechos 2
"... los que recibieron su palabra fueron bautizados; y se añadieron aquel día como tres mil personas". Hechos 2:41
Cuando Felipe predicó a la gente de Samaria, hombres y mujeres fueron bautizados, pero no se indica que bautizaron a bebés: "Pero cuando creyeron a Felipe, que anunciaba el evangelio del reino de Dios y el nombre de Jesucristo, se bautizaban hombres y mujeres". Hechos 8:12
Sí, la Biblia es explícita al mostrar que sólo deben ser bautizados quienes tienen edad suficiente para oír y recibir la Palabra de Dios, ¿por qué el catolicismo demanda que los bebés recién nacidos sean bautizados?
¿Será acaso para que las personas estén sujetas a la iglesia casi inmediatamente después de nacer? Usted debe tomar una decisión al respecto en su corazón.
Preguntamos, cuando usted fue bautizado siendo bebé, ¿fue realmente bautizado, o sólo le rociaron un poco de agua? Esto depende de cuál posición desea creer "la Palabra de Dios o las tradiciones de hombre
Tenga en mente las palabras que Jesús pronunció ante los líderes religiosos de su época: "Bien invalidáis el mandamiento de Dios para guardar vuestra tradición". Marcos 7:9
Bautismo: ¿Por aspersión o por inmersión?
{ Autor Desconocido }
"Y esparciré sobre vosotros agua limpia, y seréis limpiados de todas vuestras inmundicias; y de todos vuestros ídolos os limpiaré. Y os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré corazón de carne." (Ezequiel 36:25,26)
Hay un pensamiento popular que estos versos prefiguran la introducción del bautismo por aspersión en vez de por sumersión. Las siguientes situaciones revelan que no hay conexión entre estos versos con la ordenanza cristiana:
- Moisés fue instruido a consagrar a los levitas al sacerdocio. Dios dijo, "Y así les harás para expiarlos: rocía sobre ellos el agua de la expiación, y haz pasar la navaja sobre toda su carne, y lavarán sus vestidos, y serán expiados" (Números 8:7).
- Algunas situaciones podían hacer que una persona fuera impura hasta su purificación mediante la aspersión de agua para purificarlos. Algunos ejemplos eran los que tocaran un cadáver (Números 19:16-18), o una mujer en menstruación (Levítico 15:19). Las cenizas "de la quemada vaca de la expiación" se usaban también con agua para rociara (Números 19:17-19).
- En Ezequiel 36:25,26 Dios es el que rocía, y no un hombre a otro hombre. "y seréis limpiados de todas vuestras inmundicias..." Él compara a Su pueblo con los impuros en Israel, y usa un término de purificación que ellos podrían entender.
- Rociar se eliminó bajo el Nuevo Pacto junto con las cenizas de "quemada vaca de la expiación", etc. "Y no por sangre de machos cabríos ni de becerros, más por su propia sangre, entró una sola vez en el santuario, habiendo obtenido eterna redención. Porque si la sangre de los toros y de los machos cabríos, y la ceniza de la becerra, rociada á los inmundos, santifica para la purificación de la carne, ¿Cuánto más la sangre de Cristo..." (Hebreos 9:12,13).
- No hay conexión en las escrituras entre rociar (como ceremonia del Antiguo Testamento) y el bautismo del Nuevo Testamento, que es un acto de la inmersión completa. "Porque somos sepultados juntamente con él á muerte por el bautismo; para que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en novedad de vida" (Romanos 6:4-6).
"Y esparciré sobre vosotros agua limpia, y seréis limpiados de todas vuestras inmundicias; y de todos vuestros ídolos os limpiaré. Y os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré corazón de carne." (Ezequiel 36:25,26)