¿Es el Espíritu Santo la fuerza activa de Dios?
{ por Miguel Cabán }
Los Católicos Romanos, los Evangélicos y los Adventistas del Séptimo Día, están de acuerdo respecto a la doctrina del Espíritu Santo. No obstante, los Testigos de Jehová la rechazan aseverando que el Espíritu Santo no es una persona, sino la fuerza activa de Dios. Analicemos algunas de sus declaraciones:
"El russelismo... pretende probar, que así como el viento es una fuerza impersonal, también es una fuerza impersonal el Espíritu Santo, pero la etimología de dicha palabra no prueba absolutamente nada, pues de acuerdo con el criterio russelista, ¿debería entenderse que cuando Jesús dijo: "Dios es espíritu" (Juan 4:24) quiso decir que era sólo y simplemente viento o un poder; y no una persona espiritual inteligente y activa? Así mismo, cuando habla la Biblia de ángeles y de demonios como espíritus, ¿debe entenderse fuerzas o energías impersonales? La etimología de la palabra 'pneuma' como viento, sólo es una ilustración, una figura, así como el viento es invisible y sus efectos son visibles, también el Espíritu Santo es invisible, pero los efectos de su acción única e infinita son visibles".
"Se dice que Dios es la primera causa, la fuerza, el poder único que ha creado cuanto existe y puesto en movimiento este maravilloso universo, sin embargo Él es en sí mismo más que un poder y que una influencia, Él es una Persona, la Persona Divina; se dice de Cristo que es 'poder de Dios' (1 Corintios 1:24) y no puede negarse que Cristo es una Persona; del mismo modo que se dice del Espíritu Santo que es 'poder de lo alto' que ejerce una saludable y bienhechora influencia, pero Él es en si mismo más que un poder o que una influencia, Él es una Persona. Si Dios es Espíritu y no es energía, sino una persona, si los ángeles son espíritus y también los demonios y no son energía o poderes impersonales, no hay razón alguna para negar que el Espíritu Santo sea también una persona, máxime cuando todo el lenguaje que emplea la Biblia referente al Espíritu Santo demuestra que es una persona". (José Luís García, Los Testigos de Jehová a la Luz de la Biblia, Tarrasa: Editorial CLIE, 1976, p g. 151).
"La acción del espíritu... se asemeja a la transmisión de mensajes por ondas de radio entre personas que se hallan a gran distancia" (¿Debería creer usted en la Trinidad? p g. 22, línea 25, de la primera columna).
"Los maestros de los Testigos, en su empeño de hacerle decir a la Biblia lo que ellos quieren, hacen violencia a las evidencias bíblicas y al lenguaje, con palabras y figuras muy típicas y un tanto grotescas. Las ondas radio-telefónicas con las que comparan al Espíritu Santo en su acción, no son la causa, sino el resultado, el efecto, nada se oiría 'en el hogar distante' si detrás de todo el maravilloso mecanismo no estuviera el hombre con su mente prodigiosa, pero el Espíritu Santo según lo vemos en las Escrituras no es el efecto, sino la causa, no es la radio ni el sonido, no es el televisor ni la imagen, es la persona misma, es el ejecutor, el que actúa precisamente usando de muy diversos medios para llegar hasta el hombre y comunicarse con él, y realizar su obra regeneradora en la mente, en el corazón y en la conciencia del hombre. Las ondas radiotelefónicas o cualquier otra fuerza o energía no pueden hablar, ni enseñar, ni tienen voluntad... El propio lenguaje de Jesús y el que emplea toda la Biblia para hablarnos del Espíritu Santo, es el propio lenguaje que se emplea para hablar de una persona y no de una energía o poder" (José Luís García, Los Testigos de Jehová a la Luz de la Biblia, Tarrasa: Editorial CLIE, 1976, p g. 151,152).
"Por ejemplo, en cuanto a Sansón, Jueces 14:6 relata: 'El espíritu de Yahvé le invadió, y despedazó al león como se despedaza un cabrito' (BJ). ¿Entró o de hecho se apoderó de Sansón una persona divina, y se valió de su cuerpo para hacer lo que hizo? No; como lo dice una versión en inglés, fue realmente 'el poder del Señor lo que hizo fuerte a Sansón' (Today's English Version;)".(¿Debería creer usted en la Trinidad? p g. 21, párrafo 3).
En Jueces 14:6 no dice que el Espíritu Santo sea el poder de Dios. La versión en inglés Croday's English Version), dice que "el poder del Señor hizo fuerte a Sansón", pero hay que tomar en cuenta que dicha versión es una paráfrasis. El original hebreo habla de "el espíritu de Yahvé".
"La Biblia dice que, al bautizarse Jesús, el espíritu santo descendió sobre él bajo la apariencia de una paloma, no como forma humana"(Marcos 1:10). (¿Debería creer usted en la Trinidad? p g. 21, cuarto párrafo).
Si el Espíritu Santo no es una persona porque descendió sobre nuestro Señor Jesucristo "no como forma humana", sino "bajo la apariencia de una paloma", entonces "el ángel de Yahvé" no es un ser personal porque apareció como fuego ante Moisés. El relato bíblico dice así": "El ángel de Yahvé le apareció en forma de llama de fuego, en medio de una zarza" (Éxodo 3:2, versión Biblia de Jerusalén).
Debe notarse también que el Espíritu Santo es comparado con el fuego, según San Lucas 3:16, y la Palabra de Dios afirma claramente que Dios es "un fuego consumidor" (Hebreos 12:29). Claramente podemos ver que hablando figuradamente, tanto el Espíritu Santo como Yahvé Dios son fuego. Siguiendo la lógica de los Testigos de Jehová, el Espíritu Santo y Yahvé no son personas.
"De modo similar, en 1 Juan 5:6-8 (VP) se dice que, no sólo el espíritu, sino también 'el agua y la sangre' son testigos. Sin embargo, es obvio que el agua y la sangre no son personas, como tampoco lo es el espíritu santo" (¿Debería creer usted en la Trinidad? p g. 22, primer párrafo).
En Romanos 6:3 leemos: "¿O no sabéis que todos los que somos bautizados en Cristo Jesús, somos bautizados en su muerte?" Siguiendo el mismo razonamiento de los Testigos de Jehová llegaríamos a la siguiente conclusión: de la misma manera como la muerte no es una persona, Jesucristo no es una persona. En esta comparación (Romanos 6:3), no se desaprueba la personalidad de nuestro Señor Jesucristo, como tampoco se desaprueba la persona del Espíritu Santo en San Mateo 3:11.
"Se insta a la gente a llenarse de espíritu santo y no de vino (Efesios 5:18). Se dice que la gente se llena de espíritu santo de la misma manera como se llena de cualidades como sabiduría, fe y gozo (¿Debería creer usted en la Trinidad? pág. 22, segundo párrafo).
En Efesios 3:19 dice el apóstol San Pablo: "... para que seáis llenos de toda la plenitud de Dios" (versión Nácar-Colunga). Si el Espíritu Santo no es una persona espiritual por el hecho de que en Efesios 5:18 se dice que debemos ser llenados del Espíritu, entonces de igual manera Dios no sería una persona, pues podemos ser "llenos de toda la plenitud de Dios".
"Al emplear un lenguaje figurado respecto del Espíritu Santo dice Donaldo F. Newfeld "parece apropiado, por supuesto, hablar de Él como si fuera derramado, tal como lo hizo Pedro en el día de Pentecostés... Tampoco hay mayores dificultades para hablar de medidas cuando se está hablando en sentido figurado" (La Revista Adventista, enero 1974, p g. 5).
En Hechos 5:3, 4 leemos: "¿Por qué llenó Satanás tu corazón para que mintieses al Espíritu Santo?... No has mentido a los hombres, sino a Dios". Si el Espíritu Santo es una fuerza impersonal ¿cómo es posible mentir a una fuerza?