Según Génesis 6:1-8, ¿había gigantes en la tierra?
{ Autor Desconocido }
La interpretación popular de este pasaje es que supuestamente relata cuando algunos ángeles se cruzaron con la raza del humano, y esto era una razón para Dios destruir la humanidad con el diluvio. Vayamos ahora evaluemos cada verso, y ver qué significa.
Este verso es sincero. La población humana aumentó en cantidad.
Ahora este verso está lleno de significado. Los hijos de Dios implican aquellos quienes son obedientes a la voluntad de Dios. En oposición a éste es las hijas de hombres (no obediente a Dios). Eran mujeres atractivas y seductoras, y pudieron incitar a los hijos de Dios a relaciones íntimas y matrimonio. En hacer así, los hijos de Dios rápidamente abandonaron a Dios por estas mujeres. Vemos de nuevo la caída de Adán y Eva. Eva escuchó a las mentiras de Satanás y dudó de Dios. Comió del árbol prohibido y perdió su naturaleza espiritual.
En comer del árbol, Eva estaba consciente que había pecado contra Dios. En ese conocimiento, entonces llevó la fruta del árbol a Adán. Eva no engañó a Adán (1Timoteo 2: 14), al ver a Eva, Adán supo que ella había pecado porque había perdido la luz que la rodeaba; fue el resultado de perder su armonía espiritual con Dios. Moisés tenía esta misma luz cuando bajó de Sinaí (Éxodo 34: 29,30). Adán eligió comer la fruta, sabiendo qué hacía. Su amor por Eva era más grande que su amor por Dios.
Volviendo a Génesis 6:2, se repite la misma historia del jardín en Edén en escala mayor. Los hombres abandonaron a Dios y a sus maneras virtuosas por mujeres no creyentes. Dios llama esta manera de actuar "fornicación". No sólo al pecado sexual, también incluye mezclar la verdad con el engaño. Este pecado era tan prevaleciente, Dios no pudo permitir continuar.
Dios le establece un período de gracia de 120 años a la raza humana para arrepentirse de su maldad y cambiar sus caminos inicuos.
La palabra "gigantes" aquí en el hebreo según la concordancia de Strong es : 5303. [nephiyl], [nef-eel']; o [nephil], [nef-eel']; de H5307; un matón o tirano:- gigante. En lugar de ser gigantes físicos, eran opuestos a los hijos de Dios. Estas personas eran matones rebeldes y tiranos, poderoso en carácter y grandes en sus pecados. Esta misma frase de "gigantes" se usa también al describir algunos de los Cananeos (Números 13:33). De nuevo, este probablemente le refirió a su carácter ateo, tanto como su estatura física.
El error aquí se derriba de haber escogido personas ateas, se volvieron los hombres lejos de Dios y el pecado floreció.
El pecado llegó a ser tan grande, Dios tenía que traer el diluvio sobre ellos y limpiar la tierra de tan gran maldad.
Noé era la excepción, y se le dio la tarea construir el arca, que sería el refugio del diluvio para los hijos de Dios.
Volviendo a la interpretación popular, basado en una forzada interpretación de la frase "hijos de Dios" y "ajustando" Job 1: 6; 2: 1; 38: 7; y Salmos 29: 1; 82: 6, creen que se refiere a seres celestiales/ ángeles que se juntaron con mujeres, creando una raza horrible de criaturas que Dios tenía que destruir.
Pero, ¿qué es un hijo de Dios? Juan 1: 12 dice "Mas á todos los que le recibieron, dióles potestad de ser hechos hijos de Dios, á los que creen en su nombre:" y Romanos 8:14 "Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, los tales son hijos de Dios"." Estos versos aclaran esa frase "hijos de Dios" y se aplica a alguien con fe genuina en Dios.
Así el cuento de ángeles juntados con mujeres parece ser nada más que un intento de culpar a los ángeles en lugar de hombre. El pasaje en Génesis 6 habla sólo de la maldad humana no de ángeles.
La humanidad había vuelto contra Dios, y lo hacía en tal escala que Dios estaba movió a destruirlos. Aún así Dios en Su misericordia, en medio de toda la maldad, le dio un período de prueba la humanidad. Un período de 120 años, para Noé poder predicar el mensaje de Dios, de arrepentimiento y fe.
Hay "gigantes" en la Tierra de nuevo. De nuevo llenan la tierra con pecado. Dios no permitirá que ellos continúen así por mucho tiempo. Tal como Dios trajo su juicio al mundo de Noé, así lo hará para el fin del tiempo.